17 meses...

17 meses... 508 días... 12.192 horas...731.520 minutos y... 43.891.200 segundos desde tu nacimiento aquel 6 de marzo de 2012. Parece increíble... ayer sentía tus pataditas en el vientre por primera vez y hoy sos casi una niña. Nunca pensé que podía sentir un amor así de inmenso e inconmensurable. Te amo tanto que se me estruja el corazón al verte sufrir.


El viernes te enfermaste fuerte. Por primera vez no parabas de vomitar, te llevamos a la guardia desesperados, asustados. Esperamos horas a que te atiendan y sin más nos mandaron a casa con dieta de agua y luego sólidos. Parece que el catarro te provocaba vómitos al no saber expulsar los mocos. El sábado amaneciste con hambre pero seguías a agua de a sorbitos... casi a mediodía tomaste la leche y vomitaste automáticamente. Alarmados volvimos a la guardia, otra vez preparados para pasar la tarde. Te vió otra dra. y te inyectaron Reliverán. Teníamos que esperar casi una hora y empezar a darte una bebida isotónica de manzana para que te hidratara y recuperaras los carbohidratos perdidos. Todo esto en la misma guardia... pasado el tiempo correspondiente te volvería a llamar la dra. para darte el alta. Nos dijo que siguieras con la bebida de manzana y que comieras lo que quisieras en porciones chicas. Llegamos a casa e hicimos los deberes... terminaste agotada y te rendiste sin cenar... dormiste como un angelito. Llegó el domingo, te despertaste hambrienta y pediste la tete. Intentamos y la vomitaste de una... nos levantamos... a la hora desayunaste mate cocido en cucharita y una galletita de agua... parecía que todo biem. Llegó la hora del almuerzo y probamos con una sopa de vitina. Estabas feliz, la tomaste toda e incluso querías más. Esperamos otra hora más y te dimos otro poco. Terminaste y te dormiste sentada. Te acosté en la cama y dormiste casi una hora. Te despertaste molesta pidiendo mis brazos. No lograbas volver a dormirte y en eso, plof! Vomitaste todo... del susto rompiste en llanto... preparamos la bañadera y te bañamos. Empezaste con diarrea. Dedicimos correr a la guardia por tercera vez. Una vez allí, te ve otra dra. y otra vez Reliverán y a esperar media hora más. Te llamó a las 18 y nos dio una dieta porque tu catarro derivó en Gastroenteritis y ya no podías ingerir cualquier cosa. Volvimos a casa y cumplimos con las indicaciones. La diarrea siguió hasta la media noche pero los vómitos se cortaron por fin. Tomaste una sopita de calabaza con cabellos de ángel sin problemas. Ayer amaneciste descansada y con apetito... desayunaste te con leche con galletitas de agua. Al mediodía almorzaste sin problemas. Merendaste a las 17 con el nono. Y a las 20 cenaste. La diarrea fue cediendo... pero sin desaparecer.
Te dormiste cerca de la medianoche sin muchas ganas... más bien querías seguir jugando y saltando en la cama. Y llegó el día de hoy, 6 de agosto. Te despertaste sonriente y me dijiste: "hola mamá, tete". Me levanté a prepararla con algo de miedo... la tomaste sin problemas y después desayunaste alegre y charlatana... Se me iluminó el corazón... a medidía almorzaste y hasta tomaste la gelatina de manzana que preparé... Todavía faltan unos días para que estés totalmente recuperada. 

Pero hoy, justo cuando cumplís 17 meses, me volvió el alma al cuerpo. Y caí en la cuenta que la maternidad es así y que tengas la edad que tengas me voy a seguir asustando y preocupando cada vez que te enfermes o estés pachucha o simplemente triste. Porque sí. Porque soy mamá. Tu mamá y quiero toda la felicidad del mundo para vos. Si pudiera evitar que sufras, tenelo por seguro que lo haría con los ojos cerrados. Pero la vida es así. Con sus cosas buenas y malas. Y lo único que puedo hacer es mimarte mucho (demasiado si hace falta), acompañarte en los momentos difíciles y velar por tu bienestar siempre. Tanto papá como yo te amamos con el alma. Sos nuestra luz de vida. Nuestra pequeña brillante como el mar. Por eso quiero desearte y desearnos a nosotros, tus papis.

¡Felices 17 meses de amor y vida extra-uterina! ¡Felices 17 meses de p/maternidad!